Intentar recuperar el sueño durante el fin de semana no es buena idea porque no se recuperan las horas de sueño y mucho menos, sus beneficios. 

Hoy día llevamos un ritmo de vida acelerado. Queremos hacer muchas cosas, cumplir con nuestro trabajo, tener una vida social activa, compartir tiempo con la familia, hacer deporte, dedicarnos tiempo para uno mismo… Son tantas las cosas que queremos hacer que parece que no tenemos tiempo para dormir. 


Has oído muchas veces que debemos dormir entre 7 y 8 horas pero crees que eso es una pérdida de tiempo. ¿Por qué debes pasar tanto tiempo durmiendo y dejar de hacer cosas más estimulantes, provechosas o enriquecedoras?

Pues déjame que te responda. Debes dormir esas horas para poder rendir y funcionar bien durante tu día. Si no le das tiempo al sueño, no estarás en condiciones de realizar todas esas cosas estimulantes y enriquecedoras que quieres hacer. 


Es muy sencillo, dormimos para poder vivir.  Si no gozamos de buen sueño, no gozaremos de buena salud y entonces, ¿de qué servirá todo lo que queríamos hacer?


Es importante que duermas las horas aconsejadas para poder cumplir con los ciclos de sueño adecuados. Dormir restaura la parte más física de tu cuerpo (músculos, huesos, sistemas respiratorio, endocrino, cardiovascular… ) pero también la parte más psicológica (pensamientos, estados de ánimo, concentración, memoria…) y si estás en deuda de sueño siempre queda una parte por restaurar, cuando no las dos. 

Si duermes pocas horas, la primera parte que no restauras suele ser la psicológica, es la primera que notamos después de unos días sin dormir bien: mal humor, pérdida de memoria, falta de concentración, pensamientos más negativos, lentitud de reacción… 

Estos primeros síntomas mantienen el malestar durante el día y mantienen el insomnio. Llegando a la noche algo alterados y con ansiedad, esta combinación puede hacer que tu sueño se vuelva más superficial y con más despertares. Afectando así la calidad del sueño y por lo tanto, llegando a afectar la parte más física de tu cuerpo. A largo plazo enfermarás física y mentalmente. 

Debo decirte que los estudios han demostrado que únicamente se recupera un 20% del sueño que perdemos. Si contamos que, los adultos, debemos dormir unas 7-8 horas diarias, el hecho de dormir unas 6 horas, es decir, una media de 1-2 horas menos cada día, al final de la semana laboral habremos podido acumular unas 6 horas de sueño. Ahora piensa: ¿podrás el viernes o el sábado noche dormir las 7-8 horas recomendadas más las 6 que tienes de deuda? Parece ser imposible para la mayoría de personas. Y ahora piensa: aunque puedas llegar a dormir unas 12-13 horas (casi imposible en un adulto) ¿serían estas seguidas?¿ serían de calidad?

Otra pregunta que debes hacerte, tan o más importante como las anteriores es: ¿Qué ocurre en tu día a día? es decir, ¿cómo te sientes de lunes a viernes en tu trabajo, en tu casa, con tus amigos? Aunque esperabas recuperar parte de tu falta de sueño el fin de semana, las consecuencias de las que hablábamos anteriormente seguramente ya te hubieran afectado en algún que otro momento en cierto ámbito de tu vida (bajo rendimiento laboral, mayor irritabilidad, discusiones con tu entorno, menos tolerancia, pérdida de concentración….)

Piensa también en la somnolencia y el cansancio que vas acumulando hacia el final de semana y las consecuencias negativas que también pueden traerte (accidente laboral, de tráfico, olvidos, falta de energía, …) 

Así que yo me lo pensaría mejor a la hora de dejar el sueño de hoy para el fin de semana. Hazme caso y descansa cada día ya que, como hemos visto, el sueño no se recupera. Los resultados los gozarás día tras día.